Artículo redactado por el equipo de CEMP
Validado por equipo docente
Las unidades de gestión clínica son entidades que desarrollan funciones clave para el buen funcionamiento de los centros sanitarios.
En este artículo veremos en qué consisten estas unidades, quiénes las forman y cuáles son las principales tareas que se les encomiendan en la práctica.
Básicamente, las unidades de gestión clínica son unidades orgánicas que se constituyen en los centros sanitarios para autoorganizar la prestación de la asistencia sanitaria que les corresponda en cada caso.
Técnicamente, por tanto, se encargan de la organización y gestión de los recursos humanos y materiales que se les asignen con esta finalidad, de cara a la consecución de los objetivos marcados.
Por tanto, son una pieza esencial para que los centros sanitarios puedan funcionar de forma eficiente.
Desde el año 2015, existe un proyecto de Real Decreto para regular las unidades clínicas a nivel de todo el territorio nacional. Sin embargo, todavía no se ha concluido su tramitación a día de hoy.
De todos modos, en el ámbito autonómico sí se han publicado normativas que incorporan el concepto de las unidades de gestión clínica en sus sistemas sanitarios propios.
Por ejemplo, podemos mencionar el Decreto 57/2014, de 4 de diciembre, por el que se regula la constitución y funcionamiento de Unidades de Gestión Clínica del Servicio de Salud de Castilla y León, así como otras normas similares en Andalucía y otras comunidades.
Con carácter general, las unidades de gestión clínica van a estar formadas tanto por profesionales sanitarios como no sanitarios.
Esto es imprescindible para afrontar las diversas tareas que les encomienda la normativa, de cara a la gestión eficiente de los centros sanitarios.
Veamos cuáles son esas funciones.
Funciones de las unidades de gestión clínica
Si tomamos como referencia el proyecto de Real Decreto de 2015 (en concreto, su artículo 5), podemos ver que las principales funciones de las unidades de gestión clínica son las siguientes:
Como puedes ver, se trata de funciones bastante amplias y muy relevantes para garantizar el adecuado funcionamiento de cualquier centro que preste asistencia sanitaria.
Sin duda, contar con conocimientos de gestión especializada en centros sanitarios puede ser de enorme ayuda para coordinar unidades de gestión clínica o desarrollar otros puestos directivos similares.
En este sentido, el Máster en Gestión Sanitaria y Hospitalaria de CEMP trata de dar respuesta a estas necesidades formativas.
Así, su programa de estudios abarca la práctica totalidad de aspectos que se necesitan para ocupar puestos de gestión hospitalaria o sanitaria en general. Aquí tienes un breve resumen de sus contenidos más importantes:
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En definitiva, las unidades de gestión clínica desempeñan un papel fundamental para lograr un funcionamiento eficaz y eficiente de los centros hospitalarios y asistenciales.
En este sentido, cuanto mejor sea la formación del personal gestor, mejores resultados podrán obtenerse en el medio y largo plazo.
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